La respiración Meditoyoga es relativamente fácil de aprender dedicándole un poco de tiempo, hasta que se convierta en tu segunda piel. El uso frecuente va suavizando todo el cuerpo desde dentro, siendo un potenciadle de cualquier práctica fisica. Al ser fácil de sostener en cualquier circunstancia del día a día, va  va penetrando paulatinamente en el inconsciente, abriendo una brecha en el continuo condicionado de nuestros pensamientos, emociones y sensaciones. El bienestar va increscendo a la par que las comprensiones intuitivas.